UNA ALEGRÍA DIFERENTE

En las fechas navideñas, es fácil caer en el error de interpretar la verdadera alegría sólo como un sentimiento o estado de ánimo. La alegría es algo mucho más grande y profundo. Un principio moral, un proyecto de vida, el mejor regalo para quienes nos aman, una cualidad mental, un estado espiritual...etc. 

La celebración cristiana de la Navidad introduce el motivo de la alegría (el Nacimiento de Jesús) en la vida de los excluidos, los pobres pastores, los últimos...con una lógica diferente que sobrepasa nuestro razonamiento, nuestros parámetros...se anuncia una gran alegría por un acontecimiento divino pero la señal o el signo de ese hecho supuestamente tan alegre, sobrenatural e importante no es otro que un pobre bebé nacido en una cuadra. 

Pero ese Niño llamado Jesús (Dios con nosotros), durante toda su vida siguió dando sentido a lo que aparentemente era un sinsentido. Como ejemplos las Bienaventuranzas y la Cruz (que se transforma en símbolo de Vida).

Por eso, estad alegres desde una Alegría diferente; quizá fuera de toda lógica pero cargada de mucho sentido; el que nos regala el principal protagonista de la Navidad.