DISCRECIÓN EN LA RED



En medio de un inmenso mar de exposición mediática en la red virtual, resulta cuanto menos útil o necesario proponer una reflexión sobre la discreción. Para ello deberíamos empezar haciéndonos la pregunta de cómo queremos "aparecer" en las redes o simplemente sobre qué actitud queremos tener públicamente en Internet. 

Hay personas que ya no ven la necesidad de poner ningún límite entre lo público y lo privado. Y en sus redes, en consecuencia, transmiten sin ningún pudor todo tipo de informaciones personales. Otros en cambio, son extremadamente prudentes y se limitan a compartir sobre la vida de otros, sobre asuntos o noticias de dominio público, que poco o nada dicen sobre quien las comparte más allá de sus gustos o preferencias. Pero hay también quien comparte cosas sin más, a veces, sin ser consciente del contenido compartido.   

Otros no salen en la foto porque hay quienes desean hacerles invisibles. Sutilmente son olvidados por quienes se sienten de alguna manera amenazados o cuestionados por sus logros. A estos que pretenden borrar a otros les gustaría hacer realidad lo de que lo que no sale en la red no existe. Y se esfuerzan en recortar fotos, en no compartir sus noticias o en desviar la atención mediática. Ante esta actitud, y sobre todo en bien de la difusión de actividades grupales, habrá que buscar la forma de reivindicarse ante estos abusones virtuales con la paz y seguridad en la autoestima que posee quien no vive de la apariencia y por tanto no le hace menos feliz no salir en una foto, que le bloqueen o no recibir un "like". Con las actitudes de los "abusones" sólo se pone de manifiesto la ridiculez, estrechez de miras y prepotencia de quien manipula la información pensando que los demás son menos inteligentes o peores. 

No está de moda el valor de la discreción. Pero no por ello deja de ser algo valioso que dice mucho sobre las personas. Sobre la sencillez o humildad que, sin ni siquiera pretenderlo, pone en evidencia todo afán de protagonismo. Sobre la búsqueda de la esencia que va mucho más allá de la apariencia. Sobre fijarse en lo que importa y prescindir de lo secundario. Que prioriza una vida auténtica ante una vida virtual detrás de la cual hay grandes vacíos y carencias. Sobre la prudente inteligencia de no exponer cuanto pueda ser usado en nuestra contra y en perjuicio de quienes amamos. Sobre compartir felicidad, aprendizajes y todo cuanto contribuya a mejorar el mundo sin falsos perfiles ni mentiras en la red.